El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va;
Él nos salvó, no por nuestras propias obras de justicia, sino por su misericordia. Tito 3: 5, NVI UN DÍA
Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos
¡Gracias por hacerme tan maravillosamente complejo! Tu fino trabajo es maravilloso, lo sé muy bien. Salmos 139: 14, NTV Henry
Ustedes son la luz de este mundo. Mateo 5: 14 Cuando pienso en Cristóbal, pienso en un niño de once
Revistámonos de luz, como un soldado se reviste de su armadura. Romanos 13: 12 ¿TE GUSTARÍA TENER UNA ARMADURA integrada