Y sabemos que Dios no oye a los pecadores; pero si alguno es temeroso de Dios, y hace su voluntad,
No os unáis en yugo desigual con los incrédulos, porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué
Habito también con el quebrantado y humilde de espíritu, para reavivar el espíritu de los humildes y para vivificar el
Esdras tenía el firme propósito de estudiar y de poner en práctica la ley del Señor, y de enseñar a
Escucha, pueblo mío, mi enseñanza; inclinen ustedes su oído a las palabras de mi boca. Salmo 78:1, Nueva Biblia de
Espero en silencio delante de Dios. Salmo 62: 1, NTV. Materiales: Caleb estaba feliz porque pronto iba a entrar a