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“Mi padre no me dijo cómo vivir; él vivió y me dejó ver cómo lo hacía». – Clarence Budington Kelland

Matutina de Adolescentes

«El Señor es, con los que lo honran, tan tierno como un padre con sus hijos”

Salmo 103:13, DHH

Este es un secretito. No tienes que comprar un regalo para el Día del Padre.

Hay dos razones para esto. Primero, a los padres no se les ocurre qué quieren de regalo, más allá de «un poco de paz y tranquilidad». Bueno, eso o algo que está totalmente fuera de tu presupuesto, como un Camaro.

La segunda razón por la que no se requiere un regalo es que los padres no piensan que merecen un gran alboroto. Sus responsabilidades no son abrumadoras. Las madres son las que nos dan a luz: un proceso que suele tener momentos de incomodidad y dolor.

Las madres también se preocupan por la seguridad de sus hijos; pero los padres son diferentes. Si te acuerdas de cuando eras más pequeño, recordarás que las actividades más peligrosas en las que participaste como familia probablemente fueron idea de tu papá. Cuando alguien en el Safari de leones dice: «Veamos si podemos obtener una mejor fotografía al salir del vehículo», probablemente sea papá el que habla.

Los padres son los que te enseñan a andar en bicicleta dándote un buen empujón. Los padres son los que están en el borde de la piscina pública y dicen: «Solo arrójalos adentro y aprenderán a nadar». ¡Splash! “Dale un momento al niño; ya va a salir a la superficie. Es un instinto. En realidad… emmm… bueno, me voy a tener que mojar”.

Este Día del Padre, recuerda que tu papá tiene un mérito parcial por el hecho de que tú existes, pero prácticamente no le debes nada por seguir con vida ahora. Así que no rompas la alcancía para comprar un regalo. Además, el gozo de un padre es darte regalos a ti; quizá no todo lo que desea tu corazón, pero aún así, quiere ser el proveedor.

Esta es otra razón por la que Dios se describe a sí mismo como nuestro Padre celestial. Él no te garantiza que te mantendrá a salvo de todo problema. Pero se goza en proveer para tus necesidades. Y a cambio, no pide mucho: solo que pases un poco de tiempo con él en paz y tranquilidad.