Dichosos los que sufren, porque serán consolados.
Mateo 5:4
Cuando ves a alguien llorar, ¿cómo te sientes? Te da tristeza, ¿cierto? ¿Qué haces para ayudar al que llora? Eso se llama consolar, o sea, animar a los que están tristes para que estén alegres otra vez. Hay un pájaro que se llama grajo.
A él le gusta vivir con otras aves. Cuando uno de estos pájaros tiene una pelea con otro, su pareja, al verlo triste, va a consolarlo. Pone su pico junto al de su pareja por unos minutos y de esta manera ayuda a que se sienta mejor. ¡Qué bonito es lo que hace este pájaro!
La Biblia nos dice que debemos consolar a las personas que no se sienten bien. ¿Conoces a alguien que necesita consuelo en estos momentos? Hay varias formas de consolar. Por ejemplo, podrías regalar una tarjeta con un mensaje especial, también darle un abrazo fuerte a esa persona, tocar su rostro y hasta puedes invitar a esa persona a tu casa a comer.
Pueden hablar un rato hasta que se sienta mejor. ¿Sabes qué? Si en la conversación hablan de Jesús, eso ayudará muchísimo. Junto a tus padres, elige a una persona que necesita ser consolada y realiza un acto de amor.
Oración: Padre bueno, ayúdame a consolar a las personas que lo necesitan.
Palabra que aprendimos hoy: Consolar.