«Y que los nuestros aprendan también a hacer el bien y a ayudar en casos de necesidad, para que sus vidas sean útiles».
Tito 3:14
Sigamos hablando sobre el burro. Él es el único animal de su tamaño que no retrocede si se encuentra con un león. ¡Qué valiente! El burro también es muy gracioso y útil. Ser útil es tener la capacidad de ayudar a los demás.
Jesús contó la historia de un burro que fue muy útil, porque ayudó a un hombre a hacer una buena obra. Dice la historia que un hombre iba por un camino y unos ladrones lo atacaron, lo golpearon y se llevaron su dinero. Lo dejaron tirado y herido en el camino. Pasaron varias personas, pero nadie lo ayudó. Entonces, pasó un samaritano montado en su burro.
Aunque el samaritano no conocía a aquel hombre, se detuvo y lo ayudó. Curó sus heridas, lo subió en su burro y lo llevó a una posada para que lo cuidaran y le dieran de comer.
Jesús desea que seamos útiles para los demás, así como lo fueron el samaritano y su burrito para un hombre que estaba herido. Él quiere que ayudemos a otros y que seamos bondadosos. Puedes comenzar en casa, si mami o papi te piden ayuda di: ¡Sí, yo te ayudo! De ese modo te estarás haciendo útil.
Oración: Querido Jesús, quiero ser como el buen samaritano y su burrito. Ayúdame a ser útil para los demás.
Palabra que aprendimos hoy: Útil.
