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Hijos del corazón – Parte 1

Devocional adventista para pequeños 2022

Versículo para hoy:

[Dios] nos había destinado a ser adoptados como sus hijos suyos por medio de Jesucristo.

Efesios 1: 5

¿PUEDES IMAGINAR A UN POLLO siendo hijo de una macaca? Esta relación se dio en un zoológico en Israel. Niv, una macaca, adoptó como hijo a un pollo. Pero ha sido tanto el amor de madre hacia él, que juega, lo acaricia, lo asea y lo protege. El pollo se siente muy cómodo con ser hijo de Niv, pues no ha escapado de ella, sino, al contrario, la busca para acurrucarse cuando se va a dormir. Niv lo abraza y él duerme tranquilamente. Los cuidadores afirman que esta relación es verdaderamente extraña, ya que, en otras condiciones, el pollo no sobreviviría en la jaula con los macacos.

En nuestra vida, suceden este tipo de situaciones, pero entre las personas. Hay padres que no pueden tener hijos propios, pero tienen un corazón tan grande y tan lleno de amor para dar, que adoptan a un bebé o a un niño pequeño como si fuera su propio hijo. Los aman tanto y son tan felices, que se convierten en hijos del corazón. Hijos para toda la vida.

Dios mismo nos adoptó como sus hijos, ¡de manera que podemos llamarle Padre! Nos trata con bondad y misericordia. Su corazón rebosa de amor por cada uno de nosotros. Sé feliz, ¡porque somos hijos del corazón!

Oración: Querido Dios, gracias porque eres mi Padre Celestial. Amén.

¡Hola! Soy Vanessa. ¡Me encanta trabajar con niños! Por eso soy maestra de primaria en una escuela de México. Espero que disfrutes cada día de las meditaciones de este devocional que he preparado con cariño para ti.