Versículo para hoy:
No te pido que los saques del mundo, sino que los protejas del mal.
Juan 17: 15
¡CU, CÚ! ¡CU, CÚ!Sonaba el pájaro que salía del reloj de la abuelita Alicia para indicar que ya había cambiado la hora. Era encantador escucharlo y verlo salir por la puerta del reloj. Era muy emotivo.
En la vida real, el pájaro cucú o cuco se caracteriza por vigilar a otras aves que construyen sus nidos. Cuando el ave pone sus huevitos en el nido, el cuco espera a que la madre salga del nido, para colocar un huevito propio, tirando hacia fuera algunos huevos o comiéndose otros. Cuando la madre regresa a su propio nido, no se da cuenta de lo que ha pasado, porque los huevos del cuco son parecidos.
El cuco nace antes que los demás, porque su tiempo de incubación es menor. Entonces se apodera del nido empujando a los otros huevos fuera del hogar. Cuando la madre adoptiva regresa, lo alimenta considerablemente, como si fuera su propio hijo. Como crece más que la madre adoptiva, sale del nido para incorporarse a una rama, pues su tamaño le imposibilita seguir en la residencia.
Así como el cuco, el enemigo de Jesús desea ocupar el lugar que solo a él le pertenece. Hará que te sientas triste y sin valor. Pero no olvides que Jesús es nuestro Papá adoptivo. Siempre estará a tu lado en cualquier momento para abrazarte y protegerte.
Oración: Querido Jesús, deseo estar siempre junto a ti y ser feliz. Amén.