No prestes atención a historias falsas, que la gente inventa. Más bien, esfuérzate por ser un buen discípulo de Jesucristo.
1 Timoteo 4: 7, TLA.
Materiales:
- Imágenes de una familia con niños peleando y de otra con niños ayudando a sus padres.
- Una Biblia.
- Papel y lápiz.
Mira esta imagen que tiene mamá, hay niños peleando. Estos niños son irresponsables, ¿cómo crees que se sienten? Están enfadados y no la están pasando bien. Mira el rostro de sus padres, ¿cómo están los padres? Están tristes. Ahora mira la otra. imagen, estos niños están ayudando a sus padres con las tareas del hogar, ¿cómo se siente la familia? Sí, todos están felices.
En esta imagen están Timoteo, su madre y su abuela. Lucen felices. ¿Sabes por qué están tan contentos? Porque Timoteo era un joven muy responsable. Timoteo amaba a Jesús, y él quería ser un predicador como Pablo.
Y como era muy joven, Pablo le dio algunos consejos. Timoteo hizo todo lo que Pablo le aconsejó, y se convirtió en un discípulo de Jesús. Él hacía todo lo que hacía feliz a Dios. ¿Te gustaría ser un discípulo de Jesús? Solo tienes que hacer lo que Jesús te pide. Si eres responsable, harás feliz a tu familia, y Jesús se alegrará al ver que cumples con tu deber.
Padre bueno, ayúdame a ser un buen discípulo.
Actividad: Lee 1 Timoteo 4: 6-7, 11-13. Escribe en una hoja las cosas que tú puedes cumplir con ayuda de tus padres.