Si perseveramos, también reinaremos con él.
2 Timoteo 2: 12, LBLA.
Materiales:
- Vasos de plástico.
¿Alguna vez oíste la palabra «perseverancia»? Es cuando estás haciendo una tarea que te resulta difícil, pero aun así lo sigues intentando. No te rindes, porque eres perseverante. Vamos a poner un ejemplo. Intenta construir un castillo con estos vasos plásticos. ¡Vaya! Cuando estás llegando al final, los vasos se caen. Inténtalo otra vez, hasta que puedas terminarlo.
Hoy te quiero hablar de unos hombres que fueron perseverantes. Se trata de Pedro y sus amigos. Ellos eran pescadores. Iban en su bote al mar, lanzaban las redes y atrapaban peces. Después regresaban a tierra para vender los pescados. Con el dinero de la venta del pescado es que todos ellos vivían.
En una ocasión, Pedro y sus amigos habían pescado toda la noche, habían lanzado la red una, dos, tres, cuatro……., muuuchas veces. Descansaban un poco y otra vez volvían a intentarlo. Pero la red volvía vacía.
Ya estaban muy cansados cuando apareció Jesús y le dijo a Pedro que lanzaran la red. Pedro no quería volver a intentarlo, pero decidió confiar en Jesús y obedecer. Esta vez, al lanzar la red al agua, pescaron muchos peces.
Cuando estés haciendo algo difícil, a pesar de estar cansado, debes perseverar y confiar en Jesús. Jesús te ayudará.
Querido Jesús, ayúdame a ser perseverante y a confiar en ti.
Actividad: Hoy debes practicar la perseverancia haciendo una actividad que hasta ahora no has podido realizar, como amarrarte los cordones o alguna tarea de la escuela.