Protéjanse con toda la armadura que Dios les ha dado, para que puedan estar firmes contra los engaños del diablo.
Efesios 6: 11
En los mares y los océanos hay miles de especies, muchas de ellas aún no se han descubierto, pues el ser humano no puede llegar a las profundidades del océano. Hoy vamos a aprender sobre un curioso animal que vive entre la arena y el agua de las playas. Lee las siguientes pistas y descubre de qué animal se trata…
Vivo en la playa, al borde del agua. Si soy pequeño, puedes recogerme sin peligro.
Mis ojos están al final de dos tallos en la parte superior de mi cabeza.
Tomo prestada la armadura de otros animales porque no tengo la mía.
Cuando crezco y mi armadura se queda pequeña, busco un hogar más grande y cuando encuentro uno que me gusta, hago un rápido cambio a la otra coraza. Intento apresurarme, porque mi vientre blando hace que a los enemigos les resulte fácil hacerme daño.
Respuesta: Soy un cangrejo ermitaño. Como no tengo protección propia contra los enemigos, tengo que tomar prestadas las casas viejas de otros animales.
Así que suelo meterme en caracolas para protegerme.
Los niños, e incluso los adultos, no tienen protección propia contra su enemigo: Satanás. Pero la Biblia nos dice que nos pongamos la armadura de Jesús, y él nos protegerá. Esa me parece la mejor protección.
¿Cómo puedes ponerte la armadura de Jesús? Una manera es leer la Biblia y aprender las promesas bíblicas. Otra forma es orar. ¡Ponte la armadura de Jesús hoy!
Vicki.
