Por la pereza se cae la techumbre, y por cruzarse de brazos hay goteras en la casa. Eclesiastés 10: 18
No conocer a Dios es como vivir en la oscuridad, y antes ustedes vivían así, pues no lo conocían. Pero
«Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino». Le dijo Tomás: «Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues,
¡Que todos los habitantes de Jerusalén griten sus alabanzas con alegría! Pues grande es el Santo de Israel, que vive
El SEÑOR es mi roca, mi amparo, mi libertador; es mi Dios, la roca en que me refugio. Es mi
Las enseñanzas más importantes de la ley: ser justos con los demás, tratarlos con amor, y obedecer a Dios en







