Cuando pensamos en la palabra «sacrificio», nada bonito ni agradable viene a nuestra mente. Pensamos en seguida en pérdida, dolor,
Tengo sed. Juan 19:28. Suyas eran todas las aguas de la tierra, pero en su agonía no le dieron ni
Ramon Aréchiga realizó un acto que reveló este principio. Todo comenzó el día en que Ramón, de 26 años de…