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1 Samuel 4:6
Porque pensamos que cuando jugamos, siempre vamos a ganar. Y muchas veces no ganamos; algunas veces, empatamos; y otras veces, perdemos. Si la competencia del juego te hace pelear con tus amigos, tirarte al suelo, salir del juego, llorar, gritar o discutir con cualquiera que te enfrentes, entonces estas perdiendo la oportunidad de ganar amigos, salud y tranquilidad.
En los tiempos bíblicos del Antiguo Testamento, en varias situaciones se enfrentaron «dos equipos», los filisteos contra los israelitas. Y una vez, los filisteos les quitaron a los israelitas lo que ellos pensaban que era el botín más preciado. Si bien el arca del pacto era un mueble del Tabernáculo, allí no estaba Dios. Y todo ese tiempo que tuvieron el arca en su país, los filisteos en lugar de beneficiarse empezaron a tener más problemas y enfermedades.
Muchas veces peleamos o discutimos con alguien y pensamos que hemos ganado cuando conseguimos lo que queríamos. Sin embargo, Dios nos dice: «Pero los humildes heredarán la tierra y disfrutarán de completa paz» (Salmo 37:11).
Desafío: Fabrica una medalla y escribe «Premio al no peleador».
Lecturas Devocionales para Menores 2019
Preguntas Grandes y Pequeñas –Stella Romero