Categories

Archivos

Robles victoriosos

“Me ha enviado a consolar a todos los tristes, a dar a los afligidos de Sión una corona en vez de ceniza, perfume de alegría en vez de llanto, cantos de alabanza en vez de desesperación. Los llamarán ‘robles victoriosos’, plantados por el Señor para mostrar su gloria”

Isaías 61:2, 3, DHH

Tengo tres amigas con historias de cenizas, llanto y desesperación. Sus historias anónimas pueden ser de inspiración.

Quizá te identificas con alguna o conoces a alguien en esa situación y puedes hacer algo al respecto.La primera creció siendo brutalmente golpeada por su madre, quien descargaba la rabia acumulada por los abusos sufridos en la guerra civil en su país con todo lo que tuviera a mano.

Hoy ambas han aprendido a convivir con el perdón y las segundas oportunidades, y mi amiga tiene una hermosa familia cristiana que cuenta con la bendición de su abuela amorosa.

La segunda conoció la Iglesia Adventista gracias a un novio muy manipulador que la maltrataba física y verbalmente, que la había aislado de todos sus conocidos y, además de casi llevarse su vida, casi se lleva su identidad, lo que en algunos casos tiene efectos más duraderos y difíciles de superar.

Gracias a Dios (a quien finalmente conoció a pesar de la imagen tergiversada que había recibido de él en su relación), salió de esa situación y hoy tiene una amplia red de amigos y conocidos sobre los que tiene una influencia muy positiva, retomó contacto con su familia y creó un matrimonio que redunda en bendición. Tiene la intención de ayudar a otras mujeres que pasaron por su situación, tanto dentro como fuera de la iglesia, y que su historia sea más conocida para que este tema que tanto nos preocupa pueda recibir más atención, además de la brindada por los proyectos ya existentes.

Cree que aún sigue siendo un tema tabú y que hay muchísimo por hacer.La tercera fue diagnosticada con trastorno bipolar y, aunque a veces le cuesta pensar que eso no es una etiqueta ni algo que la define como persona, ha aprendido a sobrellevar sus emociones y reacciones, y ha salido adelante en todos los ámbitos de su vida.

Se propone crear un grupo de apoyo para otras personas con el mismo diagnóstico.Todas, en países diferentes, reconocen que han sido plantadas por Dios para mostrar su gloria y han vivido su transformación.Hoy él quiere darte una corona, perfume de alegría y cantos de alabanza a ti también.

Carolina Ramos es oriunda de Entre Ríos, Argentina, y está terminando sus estudios para ser maestra de inglés, maestra de música y traductora. Disfruta de trabajar en los diferentes ministerios de la iglesia, especialmente con los niños y adolescentes. También le gusta viajar, acampar, estar en la naturaleza, leer, tocar el piano y el oboe, y cantar. Carolina procura siempre extraer lecciones de lo chiquito y de lo grande, ver al Dios de los milagros presente en cada ámbito de nuestra vida; y espera con ansias la Segunda Venida.