Así fue Sara, pues obedecía a Abraham y lo llamaba “señor”. Si ustedes hacen el bien y no tienen miedo
Como engañadores, pero veraces; como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, pero llenos de vida; como castigados, pero no muertos;
Los humildes volverán a alegrarse en Jehová, y aun los más pobres de los hombres se gozarán en el Santo
Vale más quien habla con sabiduría, que todo el oro y las joyas del mundo. Proverbios 20:15 Un maestro preguntó:
Un día, estando Josué cerca de Jericó, vio delante de él a un hombre con una espada en la mano.
Reúne a todos los judíos, y ayunen por mí. Ester 4: 16, TLA. Materiales: Mira esta imagen, es un