Miren, yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva. Lo pasado quedará olvidado, nadie se volverá a acordar de ello.
Isaías 65:17
PIENSA EN UN RECUERDO QUE TE HUBIESE GUSTADO NO TENER EN tu mente. ¿Qué harías si te fuera posible borrarlo para siempre?
¿Sabías que, por medio de rayos láser, los científicos han logrado borrar recuerdos y activarlos nuevamente? El experimento fue realizado por investigadores de la Universidad de California que, mediante descargas eléctricas, condicionaron a unos ratones para que tuvieran miedo a ciertos ruidos.
Así, cuando los ratones oían el ruido, se paralizaban, esperando la descarga. Sin embargo, cuando utilizaron el láser para desactivar la conexión responsable de este recuerdo en el cerebro de los ratones, estos ya no manifestaron ninguna demostración de miedo. Pero si se estimulaba de nuevo la conexión, el recuerdo volvía, y los ratones nuevamente manifestaban reacciones de miedo al oír el ruido.
Hoy, 27 de enero, es el Día Internacional en Memoria de las víctimas del Holocausto. Este es un terrible recuerdo de la historia de la humanidad.
En mayor o menor medida, cada uno de nosotros también alberga recuerdos desagradables. Sin embargo, ¿alguna vez te has sentido prisionero de esos recuerdos? ¿El llanto incontenible, la vergüenza o la angustia de no ser capaz de olvidar parecen perseguirte cada vez que algo te remite a esos recuerdos?
Hay una esperanza para nuestros recuerdos dolorosos: ¡las cosas pasadas ya no serán recordadas! El día en que los recuerdos tristes nos vienen a visitar, Dios nos deja innumerables promesas de un FUTURO FELIZ para consolarnos.
No continúes pensando en el pasado; mira hacia el horizonte a través de los ojos de la fe, divisando desde ya a Aquel que vendrá a darte los mejores recuerdos para toda la eternidad.
Escribe aquí, al menos dos buenos recuerdos que guardes en tu mente:
