¡Que todo lo que respira alabe al Señor!
Salmos 150: 6
UNA PARTE DE LAS VÍAS RESPIRATORIAS, ES LA LARINGE. Significa garganta en griego, porque se encuentra ubicada dentro de ella. Aparte de contribuir a llevar el aire a los pulmones, tiene otra función principal: omitir tu voz.
En ella se encuentran las cuerdas vocales, membranas con forma triangular, que no tienen forma de cuerda. Tu garganta tiene cuatro cuerdas vocales: dos superiores y dos inferiores, estas últimas son las que generan el sonido cuando el aire pasa por ellas.
Cuando naces, tus cuerdas son frágiles y ligeras, por lo que tu voz es aguda. Conforme creces, tus cuerdas se endurecen y se hacen gruesas, lo que ocasiona que la voz sea de sonido grave.
Dios hizo tus cuerdas vocales para hablar y comunicarte con los de más, pero también le agrada que ocupes tu voz para cantar himnos y alabarlo a él.
Actividad: Toca tu garganta con tu mano y alaba a Dios. Siente la vibración de tus cuerdas vocales.
Oración: Querido Padre, gracias por mis cuerdas vocales.