No te enojes, porque eso empeora las cosas.
Salmos 37:8
EL ENOJO PRODUCE ENFADO, rabia, furor. Algunas veces las personas manifiestan enojo diciendo palabras hirientes y en ocasiones golpeando a la persona que culpan por su ira. Algunos niños realizan rabietas o berrinches cuando se enojan, avergonzando a sus padres por su conducta.
La ira te lleva a discutir y no deja a tu cerebro pensar adecuadamente. Provoca dolor de cabeza, mal humor y cansancio, pues no te permite dormir bien.
No es malo enojarse, pues es un sentimiento. Lo malo radica en no saber controlar tu enfado. Por ello la Biblia te anima a que quites todo enojo, ira, gritos y toda cosa mala de ti (Efesios 4: 31), pues te causará muchos problemas con tus amigos y familia, y también desagradará a Dios tu conducta.
Actividad: Comenta con mami algún personaje de la Biblia que no supo controlar su enojo.
Oración: Querido Padre, elimina de mi vida el enojo y la ira. Deseo agradarte siempre.