Todo este discurso termina en lo siguiente: Teme a Dios, y cumple sus mandamientos. Eso es el todo del hombre.
“La corona de los ancianos son sus nietos; el orgullo de los hijos son sus padres” Proverbios 17:6 Hace algún
“Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo; yo hice, yo llevaré, yo soportaré y
“Pon tu vida en las manos del Señor; confía en él, y él vendrá en tu ayuda” Salmos 37:5 En