EI edicto promulgado en Susa el día trece del mes primero pedía el exterminio del pueblo judío (ver Est. 3:5-15).
«En todas las provincias, ciudades y lugares adonde llegaba el decreto real, los judíos se llenaron de gozo y alegría,
«Que os améis los unos a los Otros. Así como yo os he amado, también vosotros debéis amaros unos a
«Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al
«Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en
«El camino de los impíos es como la oscuridad; ¡ni siquiera saben contra qué tropiezan!» Proverbios 4:19 La era del