Ahora pues, teman al Señor y sírvanle con integridad y con fidelidad. Quiten los dioses que sus padres sirvieron al
No te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra,
Siempre tengo presente al Señor; con él a mi derecha, nada me hará caer. Por eso, dentro de mí, mi
No te hagas ningún ídolo ni figura de lo que hay arriba en el cielo, ni de lo que hay
Por eso jamás llegará a caer. ¡El hombre justo será siempre recordado! No tiene miedo de malas noticias; su corazón
No hay nada más bello ni más agradable que ver a los hermanos vivir juntos y en armonía! Salmo 133: